Cuando viajamos ¿Qué es lo más importante? ¡Movernos! Esa es la filosofía de Erika y Paul y por ello comenzaron un viaje sin destino

Erika y Paul, es una pareja de argentinos que decidió dejarlo todo y comenzar una travesía única: un Viaje sin Destino, que iría desde Argentina a Alaska en una Kombi. Te contamos lo que vivieron.

Un viaje sin destino: una historia increíble

Su travesía comenzó en el 2013, un día juntos, decidieron cambiar su vida por completo y comenzar una nueva historia para viajar en una Kombi. ¿Por qué decidieron hacerlo? Erika es artista y Paul es actor. Ambos se dedicaban a la docencia hasta que sintieron que era necesario un cambio y se arriesgaron por completo.

La meta era viajar de Argentina a Alaska, pero era solo una excusa para poder cruzar todo el continente. Con más de una década de novios, juntos querían conocer el mundo y respirar nuevos aires. ¿Qué mejor manera de hacerlo que con un viaje por carretera?

“El punto de llegada fue solo una meta para impulsarnos a recorrer lo que de verdad importa: el camino”, comentaron juntos a un canal de TV.

Sin una ruta fija y sin planes, horarios y/o reservaciones que cumplir, se lanzaron en una aventura que cambiaría por completo sus vidas.

Su misión fue acompañada por “Aurora”, la protagonista del viaje, es una Kombi VW Bus de 1982, amarilla con blanco, que fue la responsable de trasladarlos sanos y salvos. Además, gracias a ella bautizaron su aventura como “Viaje sin destino”, porque su placa es VSD.

¿Por qué decidieron viajar por carretera, en este viaje sin destino?

Cuando hablamos de vacaciones, muchos imaginan hoteles costosos y espacios lujosos, la idea de Erika y Paul era completamente diferente. Juntos decidieron que su vida podía tratarse de unas eternas vacaciones, un viaje sin destino.

Decidieron emprender el viaje en Kombi para salir de la rutina, experimentar el mundo y unirse más como pareja. Para poder lograrlo, decidieron trazar una ruta que recorría todo el continente desde Argentina hasta Alaska con una sola idea en mente: disfrutar del camino.

También, parte de su misión era enamorarse todavía más:

“Lo lindo de tener un compañero de viaje es que aprendes a compartir la felicidad de conocer lugares con alguien más. Cuando digo viaje no me refiero solo a la aventura de conocer sitios nuevos, sino también, la vida”, explicó Erika en un post de Instagram.

Según su experiencia, viajar los hizo aún más inseparables y fortaleció los lazos que tenían como pareja porque los volvió un equipo de trabajo:

“Tener un aliado con quien transitar los caminos del gran viaje, con quien debatir qué rumbo es el que sigue, nos hace pensar en equipo”, comentó.

Así que además de ser una aventura llena de diversión, también fue una oportunidad increíble para fortalecer su amor.

¿Cómo lo hicieron?

Erika y Paul estudiaron la ruta pero no tuvieron ni un solo plan sobre lo que sucedería después. Absolutamente todo fue improvisado, y eso es justamente lo que para ellos hizo del viaje una experiencia inolvidable.

Aurora tiene una mini cocina adentro, una cama y ciertas comodidades que hacen que sea la compañera perfecta para acampar. En centros de campamento, generalmente cuentan con estacionamiento y algunas ayudas extra que hacen que el viaje sea más llevadero.

En la Kombi no se pueden duchar y tampoco tener muchos implementos extra, por lo que viajan súper ligeros. Su mentalidad es que lo más importante es la experiencia del viaje, lo demás es opcional. “Es clave disfrutar de las pequeñas cosas”, comentó Paul en sus redes.

Como parte de su plan de viaje era gastar lo menos posible, el único lujo era la experiencia de conocer, así que le dieron prioridad a lugares gratuitos o económicos.

Aprender mecánica es indispensable

Viajar en un vehículo necesita cierta preparación, además de mucha valentía y gran espíritu aventurero. Para poder tener a Aurora en las mejores condiciones, siempre guardan dentro de sus implementos, herramientas y repuestos. Además llevan gasolina para “alimentarla con la técnica del biberón” (como ellos le dicen), en cualquier parte del mundo.

Para poder lograrlo, ambos debieron estudiar la mecánica básica de su Kombi para lograr que el viaje saliera sin ningún inconveniente. Poder atender cualquier eventualidad ellos mismos sin contar con ayuda exterior, era vital para poder llevar un viaje cómodo. Muchas veces, transitaron por vías completamente desoladas en las que no existía ninguna posibilidad de ayuda.

“Si estás pensando en salir a viajar en Kombi, es preciso saber que más de una vez vas a tener que dejar tus miedos de mecánica atrás y ser capaz de revisar tu propio vehículo. Después de años viajando, limpiar y ajustar los componentes de nuestra Aurora, se volvió una labor divertida y de rutina para evitar problemas a futuro”.

Una sorpresa: ¡Bebé a bordo!

Después de cumplir su meta de llegar a Alaska, los argentinos decidieron recorrer Estados Unidos un poco más y los recibió una sorpresa extraordinaria: dejarían de ser dos y ahora, un bebé se les uniría en las aventuras.

Descubrieron el embarazo en plena ruta de descubrimiento estadounidense, y parar para ellos jamás fue una opción, de hecho, vivir la experiencia con el bebé en la barriga fue extraordinario para Erika.

“Algunos me dicen: No sé cómo hiciste para viajar durante 6 meses con el bombo a cuestas” Y para mí fue lo más hermoso que pude compartir con Munay (el bebé). No solo despertaba cada mañana en un lugar distinto, descansada y con la mente tranquila, sino que salía a caminar sin dudarlo porque confiaba en mi cuerpo a cada paso”.

Juntos bromean con ser muy “Hippies” porque su concepción de la vida es bastante ligera y relajada.

“Nunca tuve la urgencia de saber que estaba embarazada y tener que salir corriendo a un médico… Traté de simplemente tomarlo con naturalidad, con sabiduría” aseguró Erika que vivió más de 6 meses de embarazo a bordo de Aurora.

Por los momentos, viven en Argentina y no planean hacer otro viaje de esta magnitud (su bebé está aún muy pequeño), pero siguen viajando con Aurora distancias cortas y pequeñas.

Un libro que cuenta TODO

Preguntas sobre esta travesía, podríamos hacernos millones. Desde el desafío económico de viajar por 5 años sin trabajo fijo, hasta las más increíbles anécdotas que pudieron vivir juntos en su viaje en Kombi desde Argentina a Alaska.

Erika y Paúl, hacen conferencias constantemente sobre viajes y turismo, pero juntos decidieron contar su historia y llevarla a otro nivel haciendo un libro con todas sus experiencias.

El libro se titula: Nican Axcan que según las tribus mexicanas significa “Aquí y ahora” y combina perfectamente la filosofía de viaje de Paul y Erika, que buscan disfrutar cada momento del presente sin preocuparse demasiado por lo que sucederá.

¿Cómo es el libro? Está escrito desde la perspectiva de Paul, pero incluye cientos de anécdotas en las que su esposa es la protagonista. Cada página retrata todas las aventuras (positivas, negativas, emocionantes y aterradoras), que tuvieron que pasar juntos. Una experiencia que implicó viajar por 17 países y sus 80.000 kilómetros en conjunto con Aurora. Además, responde preguntas frecuentes y está escrito de manera tal que sentirás que viajas con ellos.

Si eres amante de los viajes y algún día sueñas con emprender un viaje sin destino, no dejes de leer su gran libro de aventuras.