¿Por qué se le llama tren a las nubes? ¿Qué recorrido hace? ¿Es seguro viajar en ese tren? Estas y otras preguntas asaltan la mente de los viajeros que son atraídos por el ferrocarril turístico de Argentina. La fama de este tren ha traspasado las fronteras y se ha convertido en una gran atracción para los visitantes nacionales y extranjeros.
Anualmente miles de viajeros se acercan al noroeste argentino para vivir la aventura de hacer el recorrido en el tren a las nubes. Es una experiencia cargada de emoción, a bordo de un ferrocarril que asciende a una altura superior a los 4200 metros. ¿Quieres conocer más detalles acerca de este tren turístico? Entonces continúa leyendo.
Hacer turismo en el tren a las nubes
Cuando se tomó la iniciativa de hacer el tren no se hizo para desarrollar el turismo, era más bien para el comercio. Alrededor de este gran proyecto de ingeniería había muchas expectativas, pero no tuvo la influencia que se esperaba de él en la región. Por eso con el transcurrir del tiempo fue perdiendo importancia, hasta que casi desaparece.
Pero gracias a la iniciativa de los emprendimientos turísticos, el ferrocarril resurge de sus cenizas –cual ave fénix- para convertirse en el tren a las nubes. Desde entonces –a partir de su primer recorrido turístico- es el motivo principal de miles de visitas todos los años por parte de los turistas que desean experimentar un recorrido emocionante.
La Provincia de Salta es quien recibe a los visitantes de todo el mundo, que recorren la región para disfrutar de esta aventura. Por supuesto los beneficios no se han hecho esperar, y por eso el noroeste de Argentina es un destino turístico que sigue en auge. Los aspectos más relevantes de este recorrido turístico se los contamos a continuación.
El comienzo de una historia fantástica
Este maravilloso servicio turístico del tren a las nubes, tuvo sus comienzos en manos de las autoridades del ferrocarril General Belgrano a finales de 1971. Para mediados de julio de 1972, se lleva a cabo el primer viaje turístico de manera oficial, por iniciativa de las entidades públicas del país.
Pero en el año de 1991 las autoridades gubernamentales ceden la administración de esta iniciativa turística a la empresa privada. El tren a las nubes se mantiene funcionando en excelentes condiciones. Cumpliendo con un servicio que satisface las exigencias y expectativas de todos sus usuarios.
Características del tren
Esta novedosa atracción turística argentina, tiene unas características muy particulares e interesantes que debes conocer. Por ejemplo, el tren cuenta con una capacidad para llevar hasta 468 pasajeros, atención médica, bombonas de oxígeno y guías turísticos. La música está presente durante todo el trayecto, para hacer más agradable el recorrido.
La velocidad máxima que alcanza el tren, es de 35 kilómetros por hora, a lo largo de todo el recorrido que le corresponde cubrir entre la ida y el regreso. Las vías por donde pasa el tren, están dispuesta de manera especial porque los vagones circulan impulsados por un sistema de espirales y zigzags. A diferencia de otros trenes, el tren a las nubes no usa ruedas dentadas.
Servicios a bordo
La atención que reciben los turistas que hacen el recorrido completo a bordo del ferrocarril turístico argentino, es muy completo. Para que tengan una idea, el servicio incluye:
- Coche comedor.
- Consultorio médico.
- Coche panorámico.
- Servicios de audio y vídeos.
- Personal guía para los visitantes.
- Grupos de música folclórica.
- Desayuno campestre
- Merienda
Con todas esas atenciones la cantidad de turistas que suben al tren ha venido en aumento, beneficiando mucho a la Provincia de Salta. De esa manera se crea un ambiente propicio para disfrutar de un viaje excepcional, bien sea en familia, solo o con amigos. Incluso si piensas casarte, también puedes hacerlo en el tren a las nubes. ¡Ya ha pasado!
Un recorrido especial en tren
El ferrocarril turístico trasandino recorre 434 kilómetros en un viaje de ida y vuelta, siendo una de las principales atracciones para los turistas que visitan Argentina. Su recorrido abarca desde el ramal c-14 del ferrocarril General Belgrano, en el intervalo que une la localidad de San Antonio de los Cobres con el Viaducto la Polvorilla.
Este tren es muy singular, porque realiza un recorrido en un lugar espectacular por una parte de la cordillera andina, elevándose a una altura que supera los 4000 metros. También es singular, por la cantidad de pasajeros que puede transportar. Así mismo lleva consigo una locomotora adicional, para prevenir algún imprevisto durante el viaje, de esa forma el regreso está garantizado.
Servicio exclusivo doble: autobús y tren
Tal vez se pregunten a qué se refiere un servicio especial doble. Antes de subir al ferrocarril, se dispone de un viaje de antesala en autobús, para conocer ambientes históricos y naturales de ensueño que engalanan la región. El punto de partida se inicia en la Ruta Nacional 51, haciendo paradas en determinados sitios estratégicos para que los turistas puedan fotografiar las distintas bellezas del lugar.
Luego del recorrido en autobús, toca el turno de subir al tren, el cual sale desde la localidad de San Antonio de los Cobres. Continúa su rumbo directo hasta la última parada, cubriendo el trayecto en una hora. El momento exacto de la partida es a las 12 horas, hasta alcanzar el Viaducto La Polvorilla, un sitio mágico ubicado en la pre cordillera andina. Desde acá se observan los más hermosos paisajes de la región. En este punto se lleva a cabo la ceremonia a la bandera brindando un plus a tan hermoso paisaje y recorrido.
Paradas del autobús para tomar fotografías
A las 06:15 horas se estipula salida en autobús desde la ciudad de Salta. Este es el primer tramo del viaje que los llevará hasta la estación para subir al tren. Durante todo el trayecto que se cubre en autobús, se han dispuesto varias paradas que les permite a los turistas tomar fotografías del lugar. Algunas de esas paradas son estas:
- Parada en Campo Quijano, para tomar fotografías.
- Parada en el Viaducto el Toro, toma de fotografías.
- Parada en la Formación Geológica Yacoraite.
- Parada en el Pueblo de El Alfarcito. Acá la parada es un poco más larga y se puede tomar el desayuno, así como visitar el museo, la iglesia y conocer los puestos de artesanía.
El viaje en el tren incluye atención médica
Para todos es conocido que la altura puede afectar la salud, lo que la mayoría conoce con el nombre de mal de montaña. Aunque en esta región también se le llama Soroche, mal de puna o apunamiento. Suele ser muy común el vértigo, dolor de cabeza, muchos bostezos y mareos leves, algunos viajeros han experimentado cuadros de hipoxia.
Por lo general después de pasar los 3000 metros de altura comienzan a aparecer estos síntomas que incomodan momentáneamente a los viajeros. Pero no representa un problema serio, porque cada vagón del tren cuenta con una enfermera y equipo médico para dar los primeros auxilios. La atención médica del recorrido incluye la presencia permanente de un médico para atender casos graves.
Turismo y aprendizaje durante el recorrido
El comienzo del viaje provoca emociones y curiosidad, no solo se trata de turismo, también se aprende mucho de esta hermosa región. Por ejemplo, durante el trayecto pueden observarse diferentes formaciones rocosas de varios colores que es una característica de esta zona. Esta particularidad del terreno puede apreciarse en el cruce del Viaducto el Toro, los guías les explicarán el paisaje y su modelado.
En esta zona resaltan dos formaciones montañosas muy antiguas y sorprendentes. Por un lado está el Nevado de Acay, que alcanza una altura de 5700 metros y el Yacoraite, ambas montañas tienen un aspecto imponente. Al regreso del viaje, hay una parada en Santa Rosa de Tastil, para conocer el pueblo y su historia. El museo de la localidad muestra el pasado interesante del lugar.
El apoyo de los guías de turismo
El paseo que se hace en el tren a las nubes es muy entretenido, divertido y educativo. Además de apreciar la belleza del lugar, sentir el vértigo de la altura y vivir una experiencia fabulosa, también se aprende mucho de las características de la región. Esto se debe gracias al apoyo de los guías de turismo, quienes contribuyen en gran manera a que el viaje sea más animado.
Todos ellos reciben una formación instructiva de las diferentes formaciones rocosas, así como de los tipos de suelo, la historia y geología de la localidad. Esa información la comparten con los turistas y como resultado, tenemos un viaje encantador y además muy instructivo. Una de las particularidades del personal que acompaña a los turistas, es su jovialidad y carisma, sin dudas son el apoyo perfecto.
La mejor época para subir al tren a las nubes
La temporada más recomendable para viajar en el ferrocarril turístico argentino, es en los meses que van de mayo a septiembre. La razón es, porque el clima se presenta como el más ideal para que los viajeros de todas las edades disfruten del recorrido. Se puede aprovechar el viaje con los más pequeños, los mayores o simplemente disfrutar en pareja.
Uno de los meses más recomendados es agosto, porque prevalece el buen clima y se puede disfrutar de las fiestas de la Pachamama en San Antonio de los Cobres. De igual manera podrán conocer el pueblo de Santa Rosa de Tastil, y sus fiestas tradicionales que se enmarcan en la cultura inca. ¿Qué mes escogerías para subir al tren?
Particularidades del paseo
El paseo comienza en la ciudad de Salta que está a una altitud de los 1187 msnm. Desde allí se debe recorrer una distancia de 217 kilómetros hasta el viaducto La Polvorilla. Para cubrir la distancia total, en cuanto al recorrido de ida y vuelta se invierte, un tiempo de 14 horas con 45 minutos. Este tiempo incluye el trayecto que se cubre viajando en los autobuses.
En total hay diez vagones que cuentan con calefacción más la locomotora que tiene unos servicios de primera. A través de las ventanas se pueden ver impresionantes paisajes, donde predominan las mesetas, montañas, arroyos y ríos. Mientras dura el trayecto, los viajeros prueban las populares empanadas salteñas, una pequeña muestra de la deliciosa gastronomía que hay en la región.
La llegada al Viaducto la Polvorilla
Las vigas de 63 metros de altura que se extienden a lo largo de 223 metros a una altitud de 4220 msnm, ofrecen a los visitantes una panorámica espectacular. El paisaje que aparece a la vista es realmente hermoso difícilmente se podrá olvidar, quedará grabado para siempre en el recuerdo de aquellos que tengan el privilegio de verlo.
Además de un paisaje inolvidable, la llegada al destino del Viaducto la Polvorilla, está acompañado de un gran recibimiento. Al bajar del tren un grupo de jóvenes entonan algunas canciones típicas de los Andes. Luego de ese pequeño pero emotivo recibimiento, los viajeros tienen la oportunidad de tomarse fotos y recorrer parte del lugar, bajo un precioso cielo azul que no cambia de color.
¡Una travesía sin igual!
El ferrocarril turístico de Argentina es el tercero más alto del mundo y ofrece a sus visitantes una travesía sin igual. Lo decimos por varias razones, una de ellas es la atención de primera que reciben los viajeros. Además los paisajes, lugares llenos de historia y cultura pre incaica, son un atractivo adicional para los turistas.
La puesta en funcionamiento del tren a las nubes, como un atractivo turístico tardó un tiempo en consolidarse. Tal vez la falta de publicidad o por no contar con estrategias publicitarias acertadas. Pero en los años recientes su fama y popularidad continúan en auge y actualmente personas de diferentes partes del mundo visitan Argentina para disfrutar de esta travesía.
Solo viajando por América es posible encontrar tanta variedad de destinos turísticos que sorprende e impactan a los viajeros. Sin dudas, el continente americano tiene todos los escenarios naturales que los harán vivir unas vacaciones que nunca podrán olvidar.